Netrebko's Turandot shines in London's Christmas

Turandot, Giacomo Puccini

Royal Opera House, London

Dress Rehearsal

13.12.2025

The Royal Opera House's Turandot, where the forbidden city of the sadistic Chinese princess is transformed into an orientalist Globe Theater, created by Daniel Serban, is already legendary, and its visual poetry is yet part of our operatic imagination. But this time, the ROH is announcing Christmas in grand style, not only with the Royal Opera Ballet's marvelous Nutcracker, but this time with a true gem: a stellar Turandot. This Turandot is musically pure gold.

At the head of a stellar cast, Daniel Oren leads his most beloved musical family, the Netrebko-Eyvazov duo, with perfection. Oren is all energy and passion, and the Orchestra of the Royal Opera House sounds like this, with a brilliance and color never before heard there. Puccini's orientalist chromaticism, combined with the impeccable acoustics of the London coliseum, moves us like never before, but under Oren's direction, everything is magical and intoxicating.

Anna Netrebko has stabilized her most mature vocal register, and as Principessa Turandot, her voice bursts forth beautifully in the high notes at the end of Act II alongside Yusif Eyvazoz's high C. She does so with the power of the greatest Turandots in history, soaring above the orchestral volume with excellence. In Turandot, Netrebko is not a princess, she is a true queen, and her voice is extraordinary in all registers that Puccini demands. Right now, there is no soprano who can sing this role better.

Eyvazoz continues to break records with every score he tackles. Everything his voice interprets is pure gold. Not only in the three invocations to the test, or in the final high C above the orchestral swell, but his Nessun Dorma is destined for unendless encores. He has managed to concentrate in his interpretation of the celebrated aria that opens the third act, the entire tradition stretching from Caruso and others to Pavarotti, and reinterpret it with a personal charisma that is both modern and musically excellent, with a voice of electric and melodic range, great legato skills, and impressive high notes that leave the audience breathless and him almost without oxygen in his blood.

Masabane Cecilia Rangwanasha's Liù, already heard at the Met, is tender and celestial, with a marvelous drama, especially in her final lament. Rafał Siwek, alongside her as Timur, with his opulent and dark voice, also shines with perfection.

The Ping, Pong, Pang of Germán E. Alcántara, Emmanuel Fonoti-Fuimaono, and James Kryshak, whose roles are not easy, reach heights of extreme perfection and synergy at the start of the second act, and what can sometimes become monotonous was dazzling yesterday. Raúl Giménez's Emperor is primal and sounds musically magnificent, like few Emperors of Turandot have ever been heard.

The Royal Opera Chorus continues its tradition of superlative cohesion and crystalline sound, and in this Turandot, they sound even better. Don't rush to buy tickets, because they are already sold out, but keep an eye out in case any become available, because this is the most important event in all of Europe at the end of this year.

Antonio Bevilacqua

El Turandot de la Royal Opera House, donde la ciudad prohibida de la sádica princesa china se convierte en un Globe Theater orientalista, creado por Daniel Serban, es ya mítico y su poesía visual es parte de nuestro imaginario operístico. Pero esta vez la ROH anuncia la Navidad por todo lo alto, no solo con el maravilloso Cascanueces del Royal Opera Ballet, sino que esta vez con una auténtica joya de Turandot. Este Turandot musicalmente es oro de 60 quilates.

A la cabeza de un reparto de cine, Daniel Oren, capitanea a su más querida familia musical, el dúo Netrebko - Eyvazov. Oren es todo energía y pasión y así suena la Orchestra of the Royal Opera House, con un brillo y color nunca visto. Los cromatismos orientalistas de Puccini, con la impecable acústica del coliseo londinense, emocionan como nunca antes, pero en la dirección de Oren todo es mágico y embriagador.

Anna Netrebko ha conseguido estabilizar su registro vocal más maduro y como principessa Turandot su voz estalla maravillosamente en los agudos del final del segundo acto junto al Do de pecho de Yusif Eyvazoz, y lo hace con la fuerza de las Turandot más grandes de la historia, surcando sobre la volumetría orquestal con excelencia. En Turandot, Netrebko no es princesa, es una auténtica reina y su voz luce extraordinaria. Ahora mismo no hay ninguna soprano que pueda cantar mejor este rol.

Eyvazoz continúa rompiendo récords en toda partitura que ponga delante de sí. Todo lo que su voz interpreta es oro puro. No solo en las tres invocaciones a la prueba, o en el Do de pecho final por encima del marasmo orquestal, sino que su Nessun Dorma está llamado al bis continuo. Él ha sabido concentrar en su interpretación de la célebre aria con la que inicia el tercer acto toda la tradición que va desde Caruso y otros, hasta Pavarotti, y reinterpretarla con un carisma personal que es a la par moderno y musicalmente excelente, con una voz de registro eléctrico y melódico, grandes dotes de legato y unos impresionantes agudos que dejan sin aliento y a él sin casi oxígeno en la sangre.

La Liù de Masabane Cecilia Rangwanasha que ya se oyó en el MET resulta enternecedora y celestial, con un dramatismo maravilloso sobre todo en su lamento final. Rafał Siwek a su lado como Timur, de voz opulenta y oscura, brilla también con perfección.

Los Ping, Pong, Pang de Germán E. Alcántara, Emmanuel Fonoti-Fuimaono y James Kryshak, cuyos papeles no son sencillos, llegan a cotas de extrema perfección y compenetración al iniciar el segundo acto y aquello que a veces de hace monótono, ayer resultó deslumbrante. El emperador de Raúl Giménez es atávico y suena musicalmente apoteósico, como pocos emperadores de Turandot se han escuchado.

El Royal Opera Chorus sigue en su línea de compactación superlativa y sonido cristalino y en este Turandot suenan aún mejor. No corran a comprar entradas, porque ya están agotadas, pero estén atentos por si sale alguno, porque este es el evento más importante en todo Europa en el final de este año.

Antonio Bevilacqua